El final del año es una gran oportunidad para hacer balance: reflexionar sobre lo conseguido, ajustar lo que no funcionó y fijar nuevos objetivos. Y esto no solo aplica a la vida personal o profesional, también es clave para nuestras inversiones. Revisar el comportamiento de nuestras carteras y asegurarnos de que siguen alineadas con nuestros objetivos financieros es esencial para mantenernos en el camino hacia nuestras metas a largo plazo.
Apenas quedan unas semanas para despedir 2024, un año que, con sus luces y sombras, cerrará con rentabilidades de dos dígitos en muchas carteras. Estos resultados han premiado a los inversores disciplinados, aquellos que mantuvieron la calma en los momentos de mayor incertidumbre y resistieron la tentación de vender en las caídas. Esta estrategia de permanecer invertidos a pesar de los vaivenes de los mercados, no solo ha generado buenos resultados, sino que refuerza la importancia de confiar en un plan bien diseñado y no dejarse llevar por las emociones.
El cierre del año también es el momento ideal para revisar nuestras carteras. Es una buena ocasión para hacernos preguntas clave: ¿Siguen nuestras inversiones ajustadas a nuestros objetivos y tolerancia al riesgo? ¿Han cambiado nuestras necesidades o metas financieras? ¿Podemos optimizar la fiscalidad? Revisar estos aspectos nos ayudará a corregir el rumbo, si es necesario, y a planificar con mayor claridad el año que viene.
Estos son los tres pasos clave para poner en orden sus inversiones antes de 2025:
Revise su cartera con su asesor financiero
Haga un chequeo completo de sus inversiones para comprobar si siguen alineadas con tus objetivos y nivel de riesgo. La ayuda de un asesor financiero es fundamental en este proceso; juntos podrán identificar si es necesario rebalancear la cartera, incorporar nuevas oportunidades o deshacerse de activos que aportan poco a la rentabilidad, según las expectativas para el próximo año.
Optimice la fiscalidad de sus inversiones
La fiscalidad puede marcar una gran diferencia en los rendimientos finales de la cartera. Antes de que cierre el ejercicio fiscal, revise, junto con su aseso, su situación particular para aprovechar ventajas fiscales o evitar sorpresas desagradables, teniendo en cuenta los cambios en la normativa fiscal que se hayan realizado en el año. Esta puede variar de un año a otro.
Por ejemplo, puedes analizar si conviene realizar aportaciones adicionales a tu plan de pensiones o rescates, compensar pérdidas y ganancias de tus inversiones, o decidir si es mejor vender un activo antes o después del 31 de diciembre. Aquí, de nuevo, el asesoramiento profesional será su mejor aliado para maximizar la rentabilidad neta tras impuestos.
Planifique con visión a largo plazo
Invertir no es un sprint, sino una maratón. Aprovecha este cierre de año para ajustar su estrategia, pero siempre con un enfoque a largo plazo. Revise si su perfil de riesgo sigue siendo el adecuado, reflexiona sobre las lecciones que le ha dejado este año y considera nuevas oportunidades que encajen con sus objetivos.
Cerrar el año con una revisión de sus inversiones no solo le permitirá corregir posibles desviaciones, sino también reforzar su hoja de ruta financiera. Con la combinación adecuada de análisis, asesoramiento y planificación, estará mejor preparado para afrontar los retos y aprovechar las oportunidades que traerá el 2025.
En definitiva, invierta con visión de futuro, pero tome decisiones estratégicas en el presente, siempre de la mano de su asesor financiero
Recuerde: ¡La planificación de hoy es el éxito de mañana!