La Reserva Federal ha empezado el nuevo ciclo de política monetaria acomodaticia con una contundente bajada de tipos de 50pb, mientras que el consenso del mercado situaba la bajada en medio cuarto de punto. Pese a que en años electorales podíamos esperar que la Fed bajara tipos de forma más paulatina, el banco central de Estados Unidos ha mostrado su independencia de las elecciones americanas.
La Reserva Federal defiende la solidez de la economía americana y confirma que la desaceleración de la inflación le ha dado margen de maniobra para bajar tipos y así, proteger el mercado laboral. La inflación en Estados Unidos ha disminuido hasta el 2,5% el pasado agosto, acercándose así al objetivo del 2%. Por otro lado, los datos de empleo muestran una tendencia a la baja. La tasa de desempleo se encuentra en el 4,2% y el mercado laboral está perdiendo algo de fuerza. Debemos recordar que el Banco Central tiene el doble objetivo de controlar los precios y maximizar el empleo y con su decisión de tipos busca fortalecer el empleo y el crecimiento económico.
Además, el mapa de puntos de la Fed apunta a que, de aquí a finales de años, podemos esperar o una bajada más de 50pb o 2 bajadas de 25pb. Las decisiones se tomarán mes a mes en base a los datos macroeconómicos. La reacción de los mercados a la noticia fue de inmediato positiva, pero poco a poco fue perdiendo fuelle y acabó la primera jornada en negativo. Sin embargo, la segunda jornada bursátil fue positiva, y todos los índices tuvieron fuertes revalorizaciones.